deshollinaires • 9 de octubre de 2025
¿Tu chimenea hace humo, no tira bien o se ensucia demasiado rápido? El verdadero problema no siempre está en la chimenea…
Una chimenea que hace humo o cuesta de encender no es normal. Detrás casi siempre hay una mala instalación o un mantenimiento inexistente. Descubre por qué un deshollinador-INSTALADOR habilitado puede marcar la diferencia.

Las malas instalaciones son el origen de la mayoría de problemas
Una chimenea puede parecer bien instalada y, sin embargo, esconder errores de cálculo o montaje que solo aparecen con el tiempo:
- humo que se devuelve al interior,
- fuego que cuesta arrancar,
- cristal negro,
- olores,
- hollín excesivo o incluso riesgo de incendio o intoxicación por monóxido de carbono.
El tiro, la ventilación, la altura o el tipo de conducto son factores que deben ser
diseñados y ejecutados por un profesional habilitado.
Porque una instalación mal hecha no solo compromete la seguridad: también puede invalidar la garantía del aparato y dejarte sin cobertura del seguro.
El mantenimiento no es opcional: es una exigencia y una garantía
La norma exige una
revisión anual de los sistemas de chimenea.
Mi experiencia profesional demuestra que, de media, debería realizarse una limpieza completa cada
1.500 kg de leña consumida.
Esa cifra es orientativa, porque influyen muchos factores:
- tipo de instalación y de aparato,
- humedad y tipo de leña,
- frecuencia de uso,
- condiciones ambientales, como temperatura o presión atmosférica.
Por eso es fundamental confiar en un deshollinador cualificado que conozca el comportamiento de cada sistema y sepa cuándo realmente necesita mantenimiento.
Deshollinar no es solo introducir un cepillo en un tubo
Un deshollinado profesional no consiste en pasar un cepillo y marcharse.
Incluye revisar el
estado del conducto, las juntas, el aislamiento, el sellado y el tiro, además de comprobar que la instalación cumple normativa.
Tanto
quien limpia como quien instala debe estar
habilitado por tu comunidad autónoma y debe
emitir el certificado de instalación o de mantenimiento correspondiente.
Ese documento es tu garantía técnica y legal.
Confía solo en profesionales habilitados… o desconfía de quien no lo está.
Quien no se habilita, probablemente tenga algo que ocultar.
Un profesional habilitado responde de su trabajo ante la administración.
Uno que no lo está, puede desaparecer cuando surja un problema… y tú quedarte solo frente al seguro o la administración.
Los riesgos de una chimenea mal instalada o mal mantenida
- Incendios por acumulación de creosota o deficiencia en el tiro.
- Inhalación de monóxido de carbono, un gas invisible que puede ser mortal.
- Olores desagradables, humo interior y hollín excesivo, síntomas de una instalación deficiente o sin mantenimiento.
Estos riesgos no avisan.
A menudo el problema se detecta
cuando ya es demasiado tarde.
Una chimenea bien instalada y mantenida puede durar toda la vida
Una instalación correctamente diseñada, ejecutada y mantenida por un
deshollinador habilitado, puede tener
garantía de por vida.
Eficiente, segura y limpia, como debe ser.
👉 Si tu chimenea da señales de humo, cuesta de encender o ensucia demasiado rápido,
no esperes a que el problema crezca.
Consulta con un
profesional habilitado por tu comunidad, exige siempre el
certificado de instalación o mantenimiento, y tendrás la tranquilidad de saber que
no estarás solo frente al seguro o la administración.
📞 647 700 354
Para más información sobre mantenimiento profesional, revisa este artículo de ASDE – Asociación de Deshollinadores de España.






